Mientras sigo con los entrenamientos en esta difícil época del año, a veces, la climatología te regala bonitas estampas. Pocas veces se da la circunstancia de poder pedalear por un paisaje nevado sin fastidiarte de frío. Eso es lo que me pasó el otro día subiendo al puerto de Serrablo, a 1291 metros. Es una subida de carretera estrecha que comienza en Boltaña y pasa por el pueblo de Campodarbe, con una primera mitad exigente y una segunda no tanto, pues abundan los descansos. En total subes 691 metros en 13'5 km. La idea ese día era acumular kilómetros con alguna subida importante, y el puerto de Serrablo es perfecto para empezar.
Una observación que tengo que hacer es que, de momento, las molestias en el isquión derecho siguen ahí, aunque en ningún momento fue a más y no le di la menor importancia. Me imagino que nunca se irán del todo y que lo único que puedo hacer es minimizarlas al máximo, por eso sigo nadando y haciendo estiramientos de espalda. Otro tema que tengo que cuidar es la alimentación sobre la bicicleta. Me sé la teoría perfectamente, pero como te confíes estás perdido. Subestimé la subida al puerto del Serrablo, no en cuanto a dureza, si no en cuanto a duración, por lo que cuando me quise dar cuenta no había comido nada desde el desayuno en varias horas. Eso hizo que llegara desfallecido y tuviera que parar posteriormente a comer algo decente. Es imprescindible no agotar las reservas al máximo y comer de poco en poco.
En total fueron 115'4 km en 5h 40' a una media de 20'4 km/h y 2125 m ascendidos. Eso sin contar las paradas con bocadillo incluido.
http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=6170641
Comienzo del puerto, la Peña Montañesa me estuvo siguiendo desde el Alto del Pino
Viaducto de la Ferrera
Por ahí cuelga la tirolina de la muerte
A partir de los 800 - 900 metros empezó a acumularse la nieve
De nuevo, la Peña Montañesa al fondo
Última curva
¡La cima!
¡Cómo me gusta mi bici!
El bocadillo salvador, sin él no llego a casa
